Grupo Armando Álvarez presente en EIMA con sus coberturas para árboles frutales y demás productos
- La empresa española estará presente con su equipo de técnicos y comerciales en el pabellón 34 stand A-7
- Los agricultores de todo el mundo se están inclinando cada vez más por el uso de plásticos para cubrir los árboles frutales
03.11.2022 – INFOMERCIAL
Actualmente, son muchas las razones por las que los agricultores de todo el mundo se están inclinando cada vez más por el uso de plásticos para cubrir los árboles frutales, siendo una de ellas la de proteger sus cultivos de los daños ambientales ocasionados, en gran medida, por el calentamiento global.
Las intensas lluvias o las extremas sequías, así como las inundaciones y los incendios, son factores que preocupan a los productores agrícolas, no solo en las grandes regiones, sino en todos los rincones del mundo…
Entre los árboles frutales que más han crecido en producción se encuentran los de cerezas, uvas y kiwis, experimentando estos últimos un crecimiento aproximado del 40% y 50%, respectivamente (en términos de producción por millones de toneladas métricas). Un ejemplo de ello lo tenemos en Chile, donde el cultivo de cereza ha experimentado un gran éxito gracias a los diferentes métodos de protección que se han implementado para preservar los niveles productivos y de calidad de la fruta. Esto ha permitido a Chile posicionarse como un productor y exportador de cerezas dulces de calidad. La estrategia seguida por el país andino se ha centrado en implementar el modelo de los techos y túneles altos, los cuales tienen como objetivo el calentamiento solar y la ventilación pasiva, con un sistema de riego que se puede realizar a través del goteo, trabajo manual o mediante aspersores. Por su parte, los túneles altos permiten disminuir el riesgo de que los cultivos y los frutos resulten afectados por las heladas o que se presenten problemas de fecundación en períodos críticos como floración y cuaja de frutos.
¿Por qué es necesario proteger los árboles frutales?
Esta es una de las preguntas más frecuentes. Una de las principales razones es para no poner en riesgo todo el trabajo realizado durante la temporada de cultivo, así como los ingresos que se puedan obtener, como consecuencia del mal clima o los embates de fenómenos inesperados.
Otra razón de peso para proteger los árboles frutales sería garantizar la producción, la cual permitirá asegurar acuerdos con diversos supermercados y cadenas de suministro, al tiempo que se evitan posibles sanciones, en el caso de que no se logre hacer el despacho a tiempo o no se cumpla con las cantidades y la calidad prometidas en el acuerdo. Por otro lado, estaría el compromiso con el consumidor final, quien espera recibir productos de calidad y en las cantidades idóneas para satisfacer la demanda de su mercado.
Beneficios
Entre los principales beneficios, destacaríamos su protección frente a temperaturas extremas que pueden ocasionar daños a los cultivos, así como otros factores ambientales como la humedad relativa, la lluvia, el granizo, las heladas o el viento.
Otro de los beneficios de nuestra cobertura para árboles frutales es que se puede adelantar y retrasar la cosecha, según los requerimientos y lo que se quiera obtener durante la temporada de cultivo.
Asimismo, se logra mejorar la calidad y el estado de los árboles y sus frutos, el color de la fruta es más vivo, hay una reducción significativa del uso de agua y de pesticidas y la fruta obtenida para exportación tiene una mejor proporción, en comparación con métodos convencionales de cultivo al aire libre.
Estructuras más populares
En la actualidad, los productores agrícolas generalmente se valen de estructuras de invernaderos o túneles altos para sus cultivos bajo protección. Por ejemplo, en Estados Unidos los cultivos bajo cubierta se han triplicado desde el año 1979, por lo que las ventas se han multiplicado por 30 durante el mismo período. Se espera que esta tendencia siga creciendo conforme vaya prosperando la demanda de productos frescos de origen hortícola.
Al emplear estas estructuras, sobre todo para árboles frutales, se logra:
• Mayor cantidad y calidad en los productos
• Generar un entorno de protección especial para cuando se presentan fenómenos climáticos severos como el granizo o las heladas
• Elevar la temperatura de los suelos más rápidamente una vez llegada la temporada de primavera
• Utilizar la cantidad adecuada de agua para evitar comprometer la integridad de los terrenos al aparecer enfermedades fúngicas como consecuencia de un suelo muy anegado
• Proteger los árboles frutales de bichos, animales y heladas
En el caso de países donde las tormentas de granizo son frecuentes, lo recomendable es utilizar un material resistente como la rafia laminada que permite proteger mejor al cultivo y, de presentarse alguna abertura, hay garantías de que no se romperá por completo.
En regiones donde hay bajas temperaturas y vientos fríos fuertes, lo más idóneo es buscar coberturas plásticas que tengan propiedades térmicas.
Aspectos fundamentales que debemos tener en cuenta a la hora de elegir la cobertura de árboles frutales:
Tecnología: es muy importante estar familiarizados con las tendencias en tecnologías de extrusión con las que se pueden fabricar los diferentes tipos de materiales, ya sea polietileno de baja densidad u otros materiales de mayor densidad como la rafia laminada. También es fundamental analizar los diferentes acabados del plástico, ya sea con refuerzos centrales y laterales, perforado o con ojales metálicos. Esto dependerá de las especificaciones de la siembra, la capacidad de inversión y las necesidades de cada agricultor.
Investigación y desarrollo: es de vital importancia elegir plásticos fabricados con diferentes materiales que se puedan adaptar a las diferentes necesidades de cada cultivo (adecuada transmisión y difusión de luz solar, resistencia a pesticidas, propiedades mecánicas e incidencia de los rayos UV).
Conocimiento y experticia: dependiendo de la variedad de árboles que se van a cultivar, tipo de estructura y el uso que se le va a dar, es fundamental saber qué material se va a escoger.
Retorno de la inversión:
Hoy en día, el uso del plástico para la cobertura de árboles frutales es vital para buscar el retorno de inversión en algunas especies frutales como uva, cereza o plátano. Los agricultores que se dedican al cultivo de frutas, sobre todo en zonas de América del Norte, Latinoamérica y Europa, deben hacer frente a ciertos desafíos para mantener sus cultivos en óptimas condiciones, no solo por tema del cambio climático, sino también por la incidencia de otros factores como los insectos y plagas que pueden llegar a afectar su producción final.
De ahí la importancia de analizar todos y cada uno de los aspectos que entran en juego al momento de cultivar, por ejemplo, cómo el tipo de árbol frutal elegido, y la latitud en la que se encuentran sembrados, influirán de manera directa en las decisiones que deben tomarse a la hora de precisar los detalles relevantes en cuanto al coste y la conservación del cultivo.
Hay que tener presente que la demanda mundial de frutas, independientemente de la época del año y de los embates climáticos, sigue en aumento.
Esta demanda de frutas, cada vez mayor, obliga a los productores agrícolas a redefinir sus estrategias, no solo para poder cultivar durante todo el año, sino también para mantener su liderazgo en el mercado y garantizar productos de calidad.
Espesores recomendados:
La elección del espesor adecuado dependerá del terreno, la región donde se encuentre y el tipo de cultivo que se va a sembrar, así como de otros factores climáticos. Para establecer un aproximado, se podría decir que una película plástica puede estar entre los 120 y 150 micrones de espesor, esto se puede aplicar a los cultivos de uvas o cerezas.
Reciclabilidad:
Actualmente, el tema de la reciclabilidad está presente en todos los círculos empresariales. Si bien, se trata de una duda que surge con bastante frecuencia, lo cierto es que los plásticos son reciclables, y cada vez más agricultores buscan alternativas sostenibles con el medio ambiente.
Un aspecto que no se debe pasar por alto son las partes metálicas que puedan estar unidas al plástico, por lo que al momento de removerlo hay que tener especial cuidado de retirar cualquier pieza metálica antes de llevarlo al centro de reciclado. En la actualidad se están desarrollando nuevos materiales con nuevos acabados para tratar de eliminar cualquier partícula de metal.
De este producto y muchos otros estaremos hablando en la próxima feria EIMA que se celebrará del 9 al 13 de noviembre en Bolonia. Puedes encontrar a Grupo Armando Álvarez en el pabellón 34 stand A-7. Nuestro compañero Borja Devís estará encantado de ayudarte. ¡Te esperamos!
Noticias relacionadas
