Herramientas para un buen sistema radicular en arándano
Si el suelo con que contamos no es óptimo, podemos … mejorarlo, cultivar en maceta y realizar cultivo hidropónico
En arándano, al igual que ocurre en otras especies de berries y frutales, las raíces son un componente principal de la calidad; un huerto con malas raíces dará lugar a fruta mala. La distribución de las raíces en el suelo dependerá de la preparación del suelo, el pH y la disponibilidad de nutrientes y del riego. Otro factor que también influirá será la poda; ésta estimula el crecimiento de nuevas raíces y generación de hormonas favorables para un buen fruto. La calidad inicial de la planta proveniente del vivero es también determinante; las raíces enrolladas en el contenedor limitan el crecimiento. En huertos jóvenes muchas veces muertes repentina ramas, se debe a problemas de enrollamiento de raíces.
¿Cómo salvar limitantes del suelo?
La tecnología actual permite básicamente tres tipos de actuaciones: (1) mejorar la calidad del suelo existente, (2) cultivo en maceta y (3) cultivo en bolsas de fibra de coco listas para usar.
Mejora de la calidad del suelo
Cuando se trata de cultivar arándanos en suelo, cuando las condiciones del suelo no son las adecuadas, se necesita incorporar mejorantes para la preparación del terreno cultivable. Suele suceder que no todos los terrenos son aptos por no contar el ph que requiere el arándano. A veces, suelos arenosos impiden el buen desarrollo del cultivo de arándano. En estos casos se requiere la aplicación de sustratos especiales con nutrientes con el fin de que la planta establezca sus raíces adecuadamente.
Álvaro Villalba, Ingeniero Agrónomo especializado en arándano, Comercial Projar, recomienda mejorar los suelos para el cultivo de arándanos usando sustratos profesionales como Sustraberry® Arándano Premium, compuesto de turba rubia de estructura gruesa, con fibra de coco Cocopeat Coarse® y perlita.
El sustrato para mejora de suelos es de granulometría gruesa, libre de patógenos y de semillas de malas hierbas. “Es perfecto para plantas como el arándano, que exige valores de pH ácidos. El intervalo óptimo es 4,5 y 5,5”, explica. Este sustrato, es de larga duración, puesto que el coco se degrada menos que la turba. Además, proporciona estabilidad física y la fibra de coco evita la compactación y, por tanto, facilita un correcto drenaje.”
Aplicando sustrato en el hoyo de plantación se consigue que las raíces se establezcan con mayor facilidad y que además se desarrollen mucho mejor, ya que la combinación de equilibrar el pH junto a mayor materia orgánica proporcionada por la turba, hacen que la planta crezca mejor. Esto hará que la planta empiece a producir antes y con mejores cosechas tanto en términos de cantidad como de calidad.
Cultivo fuera del suelo
Para cultivar fuera del suelo es posible hacerlo en macetas, con sustrato a elección, o hidroponía, en bolsas con fibra de coco listas para utilizar. Ambas opciones tienen la ventaja de no depender de las condiciones de suelo locales. Permiten trasladar la producción de arándano a zonas con mejor clima, o mejor calidad de agua o incluso mejor acceso al mercado de consumo.
Referencias
¿Cómo lograr la máxima calidad en frutos de arándanos? Gonzalo Allendes, AGQ, Info Berries 2017-18